Huarmey,playas paradisiacas.

Huarmey es una amable población colgada de la Panamericana Norte dentro de un fértil valle enmarcado entre zonas agrícolas y yacimientos arqueológicos. De gente amable y excelencia gastronómica a Huarmey se le denomina "ciudad de la cordialidad”. También es importante porque a través de su puerto la empresa "Antamina" trae el cobre desde las serranías de Ancash. Huarmey está a 5 horas de viaje carretero desde Lima en dirección norte. No obstante, el mayor atractivo de esta ciudad son sus espectaculares playas. Hay

que anotar que Huarmey es la provincia sureña del departamento de Ancash, el mismo que cuenta con 3 provincias costeras: Santa (Chimbote), Casma y Huarmey, colindando con Lima y la provincia de Barranca. Tuquillo es sin lugar a dudas la playa huarmeyana por excelencia. De pocas edificaciones en su ensenada y varios restaurantes precarios, esta playa puede enorgullecerse de haber sido denominada como la mejor playa del Perú hace un par de años. Y razones para

ostentar este título no le falta. Su mar calmo, aunque un poco frio, exento de olas y sumamente cristalino convierten ésta playa en una verdadera piscina natural en donde todo mundo puede chapotear sin desconfianza por alguna ola complicada que pueda surgir. Al costado de Tuquillo se encuentra otra ensenada. Se le conoce como Maracaná aunque en el mapa de IGP se le denomina "Marín”. Ambas, Tuquillo y Maracaná son los lugares más visitados por los veraneantes en este lugar del Perú. A estas se les une el par de pozas de piedra que es denominada "Las Pocitas" y se encuentran ubicadas al costado derecho de Tuquillo. Sin embargo en Huarmey veremos muchas playas más, cada una más hermosa, de aire límpido y mar turquesa, de aguas tranquilas y otras algo más bravas que invitan a los surfistas a visitarlas. Desde Bermejo hasta El Erizo, pasando por

El Tamborero, Las Zorras, Hormigas, Los Médanos y la propia Caleta Culebras, En Huarmey se ostenta el encanto de las playas de Ancash, un departamento de la

costa central del Perú en donde las altas montañas de los Andes llegan hasta el mismísimo Océano Pacífico creando hermosas ensenadas, extensas playas algunas de piedra y otras de arenas y altísimos farallones.